La sexualidad humana es compleja, pues a diferencia de la mayoría de animales, en los cuales se liga a la reproducción, en los seres humanos involucra aspectos sociales, culturales y psicológicos. La sexualidad humana involucra placer, no se limita a la fertilidad y se vivencia y expresa de muchas maneras. Es por eso que la psicología juega un papel muy importante en el estudio de la sexualidad humana y complementa a la sexología.

• La sexología es la ciencia que estudia el hecho sexual humano y se nutre otras ciencia como la medicina, la antropología, la sociología, la psicología, entre otros.
• La psicología se ocupa de la comprensión de la conducta y abarca todos los aspectos de la experiencia humana.

Desde la psicología podemos entender cómo las conductas y actitudes hacia la sexualidad, influyen en la salud y bienestar del sujeto.

Si bien, algunas disfunciones sexuales podrían tener un origen orgánico, es sabido que una importantísima parte de estos tiene un origen psicógeno, que puede ser tratado. Tanto en hombres como en mujeres, la ansiedad, las percepciones y los eventos vitales influyen en su desempeño y disfrute sexual; tanto es así, que muchos problemas sexuales disminuyen o desaparecen con tratamiento sexológico – psicológico, mejorando las relaciones de pareja o el bienestar personal.